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Jul 10, 2019

Llega el coro Singing City a Tepotzotlán

 

La música no conoce fronteras

Por Alberto Vega [Albar Says] para www.tepotzotlanpueblomagico.org

En el marco de la temporada de Música Internacional en el Museo Nacional del Virreinato en Tepotzotlán, el Coro Singilg City llegó para conquistar los oídos y los corazones de los asistentes desde Philadelphia Estados Unidos. El pasado 7 de julio del 2019 a las 13:00 horas, el presbiterio de San Francisco Javier recibió a más de cincuenta exponentes vocales para dar a conocer su propia visión y concepción musical, que además de representar toda una tradición ideológica de equidad, igualdad y apertura en paradigmas.  

La misión del ensamble vocal es descrita en su propia definición como; “la interpretación musical por medio de Performance, Arts Education y Fellowship. Singing City es una fuerza para el impacto social, que une a las personas y eleva el espíritu humano a través del arte de la música coral”. Herederos del movimiento Fellowship House, se profesan como fervientes promotores de la igualdad humana entre las diferencias raciales, religiones profesadas y diversidad cultural, observables en personas comunes que se unían en actividades compartidas durante el apogeo del movimiento social.

Singing City fue integrado en 1948 y siempre se ha distinguido por integrar afrodesendientes y luchar por los derechos de los mismos. En la actualidad también desempeña programas educativos para jóvenes, estimula el Coro Infantil de Singing City y T-VOCE (Conjunto de Voces de Adolescentes de la Ciudad), y Programas de actividades sociales para poblaciones subatendidas.

Gracias a su trayectoria, el coro ha sido acreedor del Premio Brazeal Wayne Dennard de Chorus America en 2019. Presea que a lo largo de la historia es otorgado a aquellas instituciones o personas que se dedican a fomentar una comunidad inclusiva por medio del arte.

Durante su tour 2019 por México se presentaron por diferentes teatros de Guanajuato, Querétaro y Tepotzotlán, con un concierto titulado “Songs for Mexico”. En él fueron interpretadas melodías de la tradición estadounidense,  afrodesendientes, latinas, mexicanas y canadienses. A forma de homenaje en Tepotzotlán entonaron “La Martiniana”(del dominio oaxaqueño), “La bruja”(de la tradición veracruzana) y “La Llorona”(emblemática canción Istmeña).

Por más de una hora, el coro cautivo a los asistentes con un histrionismo característico, además de interactuar entre ellos. Los integrantes dejaron el alma en el escenario al bajar del presbiterio y abrazar, saludar al público y agradecerles su asistencia en diferentes idiomas, mímicas y reconocer que se deben a los asistentes para crear y consolidar su misión artística. Al despedirse, el jolgorio fue tal, que integrantes y asistentes corearon melodías que hablan sobre la fraternidad humana.   

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