Tamales y atole para todos
Feb 5, 2020
4to Festival del Tamal y del Atole Xochitla
Sabor, rito y convivencia
Por Alberto Vega [Albar Says] para www.tepotzotlanpueblomagico.org
Xochitla Parque Ecológico presentó del 1ro al 3 de febrero el 4to Festival del Tamal y del Atole, como parte de su propuesta para mantener e incentivar las tradiciones mexicanas. El Parque Ecológico, comprometido con su visión y sus valores, busca crear un vínculo sólido y fortalecido entre las familias mexicanas. Por ello, además de encontrar deliciosos platillos, también se acompañaron de actividades culturales y sociales pensadas para todas las edades.
Oaxaca, Puebla, Hidalgo, Michoacán, Querétaro y el Estado de México fueron los principales exponentes. Cada estado presentó a los Tamales y los Atoles con sus ingredientes y presentaciones características, servidos en platos y jarros de barro, nutrieron de misticismo que acompaña la casa de las flores, con el clima propio del invierno y en la periferia de la zona conurbana.
Por su parte Oaxaca acompaño el envuelto con chapulines y mole negro, acompañado de téjate. Pachuca sorprendió a los asistentes con tamales de barbacoa, un pico de gallo de chiles manzanos, cebolla y limón y para acompañar pulque. Yucatán cautivo con tamales de cochinita pibil, cebolla morada y habaneros. En Querétaro los canarios sorprendieron a los asistentes con mantequilla, arroz y leche. Puebla conquistó paladares con un indiscutible tamal entintado de mole poblano, agua de avena, arroz y maíz, un sabor muy parecido a la horchata.
Cabe destacar que el anfitrión no nada más sorprendió, también dejo volar la imaginación con sabores impensables, como el tamal de gansito, el de chocolate o flor de calabaza con queso Cotija, elote o chicharrón en salsa verde. Todos contaron con el respaldo de Restaurante El Silo, así como las recetas de Chef Enrique Álvarez. Por su parte en la bebida la casa ofreció atoles de Ajonjolí, pinole, avena con manzana, amaranto con coco y champurrado.
A medio día pudo disfrutarse el destapar del Zacahuil, tamal de tierra propio de la huasteca, relleno con carne de cerdo y pollo en salsa morita y chille ancho. También se enseñó a los asistentes a preparar del Téjate, bebida ancestral realizada con cacao y maíz. No faltó el poder disfrutar de bailes típicos e Veracruz, Chiapas y otras regiones del país. Así como la adoración a Centéotl dios del maíz para los Mexicas.
Aunado a estas actividades, el parque ecológico contó con sus actividades de rutina, como lo fue; tren, lanchitas, acuaesferas, laberinto, casa ecológica urbana, bicis, triciclos, inflables y burbujas. Además de poder disfrutar de avistamientos de aves permanentes y de temporadas, árboles y plantas de México, además de mantenerse en comunicación con la naturaleza y la paz del campo, Xochitla es y seguirá siendo la propuesta ideal para disfrutar y escapar de la ciudad, sin necesidad de cruzar alguna caceta.
